Por: Felipe Cruz García
Samy Gurrión, sin rumbo, solo hizo ruido como gallina clueca/Su achichincle Omar Acevedo también quiere ser representante popular
El según bronco de Oaxaca, Samy Gurrión, seguramente invirtió muchos millones de pesos para posicionar su precandidatura como aspirante al Poder Ejecutivo, sin embargo, los oaxaqueños le dieron las espalda, porque saben perfectamente que es un político más que solo quiere llegar al poder para saquear las arcas del Estado.
Casi dos años anduvo recorriendo al Estado, sin consolidar algún proyecto, pero, para engañar a los dirigentes nacionales y estatales de su partido, con acarreados llenaba sus eventos.
“Como buen empresario”, que ha comentado que empezó desde abajo, seguramente vendiendo chicles, que por cada peso que invirtió en su precampaña será recuperado a cambio de algún puesto de diputado o de regidor en el Ayuntamiento citadino.
En resumen, a unos días de que se defina quien será el bueno para que sea el abanderado del PRI, a la gubernatura, Gurrión ya quedó todo desinflado, ya sin aire, porque últimamente se ha visto casi solo, o a veces acompañado de su fiel achichincle Omar Acevedo, quien también quiere ser diputado ¿pero con qué méritos, si no ha hecho nada en benefició de las comunidades del Estado, solo anda de grillo, para ver que pesca, como buen oportunista.
Finalmente, Samy Gurrión ya no quiere saber nada de la política porque los otros precandidatos lo rebasaron en popularidad, bueno en todo, y él quedó como un merolico más de la grilla barata, o como gallina clueca, que si al caso, según comentan en la política local, le van a dar una regiduría en el Ayuntamiento de la ciudad de Oaxaca.