Por: Felipe Cruz García
El tema de la sucesión gubernamental en Oaxaca, sigue tenso
Oaxaca, Oax., 22 de enero de 2016.- El tema de la sucesión gubernamental en Oaxaca sigue tenso, sobre todo en el PRI, que ha provocado mucho nerviosismo entre los militantes.
Finalmente son dos los precandidatos que llegaron a la recta final: Alejandro Murat y Eviel Pérez Magaña, y los demás que se mencionan solo están de relleno, que hicieron ruido para lograr algún puesto de consolación, como reza el viejo dicho: a río revuelto, ganancia de pescadores.
En los Pinos, el tema ya está decidido; ya el número uno instruyó al dirigente nacional del Partido Tricolor, Manlio Fabio Beltrones, que de la información en su momento, con mucha precaución, que no sea de golpe, porque podría afectar la unidad del priismo oaxaqueño.
Por el nerviosismo que ha provocado sobre quien será el bueno, algunos actores políticos han manejado en la redes sociales que ya hay luz verde para tal precandidato y que de un momento a otro haría su presentación, sin embargo, como comentamos, aún no hay nada hasta el momento, todo sigue en suspenso, pero de que está decidido el asunto, ya es un hecho.
EN EL PRD ESTA “ENTRAMPADO” EL ASUNTO
En el PRD estatal hasta el momento todo sigue enredado, porque la directiva de este instituto político insiste en obedecer la línea del gobernador Gabino Cué, que José Antonio Estefan Garfias sea el bueno, que sería un error garrafal, porque el que tiene la presencia, el arraigo, el trabajo es el senador Benjamín Robles Montoya, según como lo dio a conocer el senador de la república, Miguel Barbosa Huerta.
A nivel nacional un amplio sector del PRD se pronuncian porque Benjamín Robles sea el candidato del PRD a la gubernatura, porque según en las encuestas, es quien está mejor posicionado; y que por su trabajo desde hace varios años en favor de los oaxaqueños lo convierte en el aspirante natural de este partido.
Mientras tanto, según como se ha consignado en los diferentes medios de comunicación, José Antonio Estefan Garfias, no tiene trabajo político; es un precandidato inflado por el ex gobernador Diódoro Carrasco Altamirano y el gobernador Gabino Cué.
En ese tenor, el dirigente estatal del PRD, Antonio Carol Altamirano, no sabe qué hacer, porque no tiene decisión propia, y lo más probable es que obedezca las órdenes del gobernador Gabino, para quedar bien con el grupo de malandrines que quieren seguir saqueando al estado de manera impune.
Bajo este contexto, como se recuerda, hace algunos años, cuando Carol Altamirano era priista de hueso colorado abanderando las siglas de la extinta Democracia 2000, siempre se quejó del autoritarismo, la arrogancia y el caciquismo de su ex partido, sin embargo, ahora como dirigente del PRD hace lo mismo, sin hacer gesto alguno, de acuerdo a las quejas de sus propios militantes.
Solo faltaba que le dieran poder para saber quién era realmente, y efectivamente, como lo han señalado en la voz populi, resultó ser más de lo mismo: un dirigente enfermo de poder, que solo le interesa estar al servicio de poderosos que en los últimos seis años con el cuento de paz y progreso se adueñaron del estado, sin importar que más de 3 millones de oaxaqueños vivan en condiciones de miseria.