Washington. (La Jornada) La Casa Blanca se puso el martes al frente de la tarea para consagrar los derechos de los homosexuales estadunidenses en una ley federal, abriendo una batalla en un año electoral con los conservadores republicanos.
Después del hito que supuso la aprobación del matrimonio gay, la Casa Blanca dijo que le gustaría ver una legislación que proporcione protección contra la discriminación.
Las medidas buscarán modificar la cincuentenaria ley de derechos civiles para combatir la discriminación contra las personas lesbianas, gay, bisexuales y transgénero.
“Esto es algo que el gobierno ha estado revisando desde hace varias semanas”, señaló el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
“Tras esa revisión ahora es claro que el gobierno apoya firmemente una Ley de Igualdad. Ese proyecto es una legislación histórica que podría permitir avanzar en el propósito de conseguir la igualdad para millones de estadounidenses”, añadió.
La propuesta enfrentará la previsible oposición de los republicanos que controlan el congreso.
Este martes, Obama se convirtió en el primer presidente que sale fotografiado en una publicación de la comunidad LGTB, al aparecer en la portada de la revista OUT100, con un titular que lo califica como “Nuestro Presidente” y “Aliado. Héroe. Icono”.